26.- AMIGO LEJANO

Llegaste Señor de muy lejos
para encontrar al amigo perdido.
Llegaste Señor de muy lejos
y pocos hombres en Ti han creído.
El viento que lleva una triste canción,
un canto de muerte y de miedo.
Se ha infiltrado una gran emoción
que se ha transformado en anhelo.

Y aquellos que te han sido dados
los has llamado a todos amigos.
Y aquellos que te han golpeado
Tú, sin embargo, los has querido.
Después te han matado como un malhechor.
Has muerto sufriendo dolor.
Y bajo la luz que tu madre lloraba,
tu madre contigo sufría.

Se ha dado la voz de que vives
que has encontrado al amigo perdido.
Se ha dado la voz de que vives
y muchos hombres en Ti han creído.
Y ahora caminas en nuestro sendero,
estando siempre a nuestro lado.
Y ahora conmigo no eres extranjero
para el hombre que Tú has salvado.