El pueblo gime de dolor,
quiere resurgir.
Moisés, caudillo de Israel,
va a librarlo al fin.
OYE, PADRE, EL GRITO DE TU PADRE.
OYE, PADRE, MANDA AL SALVADOR.
El pueblo anhela vida y paz,
quiere resurgir.
El pueblo esclavo en marcha está,
hacia el porvenir.
La marcha es dura y recio el sol,
lento el caminar.
Pero un caudillo al frente va,
dando aliento y paz.